lunes, 14 de noviembre de 2022

APRENDER A SER AUTÓNOMOS

 La autonomía es un indicador de madurez y se encuentra íntimamente ligada con el desarrollo moral e intelectual de la persona. 

  • Por eso, resulta fundamental fomentar su desarrollo desde que son bebés. Como sucede en cualquier otro ámbito, algunos niños nacen con una mayor predisposición a la autonomía (desde que tienen pocos meses de vida, se les ve atrevidos, curiosos, con iniciativa...) y otros, con menos (son más retraídos, temerosos, están a la expectativa...).
  • Sin embargo, en la mayoría de los casos, son los adultos que les rodean quienes más influyen en estos comportamientos, fomentando una actitud más o menos dependiente. Porque, como sucede con cualquier otra cualidad, también se puede aprender a ser autónomo. 
¿CÓMO SE CONSTRUYE LA AUTONOMÍA?

En el fondo, este proceso vital de aprendizaje y construcción de la personalidad se reduce a pasar de dejar que nuestras acciones estén gobernadas por una persona externa (padres, docentes, etc.) a hacerlo por uno mismo. Cuando alguien es capaz de gobernarse a sí mismo, será menos gobernado por los demás y, por lo tanto, más libre y más autónomo. 
  • Si comprendemos esta situación tan básica, será fácil entender que, como padres o adultos responsables, nuestra labor no es otra que la de ir ayudando a los pequeños a desarrollar esas habilidades que, en un futuro, les van a permitir emancipase. Pero ¿cómo se hace eso? La respuesta es sencilla: entrenándoles.
  • Simplemente, se trata de ir promoviendo y facilitando situaciones en el día a día en las que los niños puedan practicar estas habilidades: desde comer solos o tirar su pañal a la basura, hasta resolver desacuerdos entre hermanos. También hay que encontrar momentos en los que tengan la posibilidad de elegir entre varias opciones (decididas de antemano por el adulto, claro), porque esa libertad genera compromiso, motivación y también responsabilidad, elementos fundamentales para el desarrollo de la autonomía. 
  • Asimismo, es importante aprovechar estas situaciones para cultivar hábitos de esfuerzo, sacrificio y autodisciplina, porque esto les ayudará a definir su carácter y a desarrollar un amor propio que potenciará su capacidad de autosuperación. Todo ello contribuirá al enriquecimiento de las funciones ejecutivas, entre las que destaca especialmente el autocontrol, herramienta fundamental para el desarrollo natural de la autonomía y la independencia personal. 

viernes, 11 de noviembre de 2022

LO QUE AYUDA A SER FELIZ:

  •  Verse con amigos: habla de ti mismo con los demás y escucha a quien pueda aportarte algo para rediseñar tus patrones de comportamiento para ser más positivo.
  • Afrontar los problemas: una buena forma de superarlos es plantearse siempre la peor situación posible. Si imaginamos lo peor estaremos preparados para afrontarlo, y si el desenlace no es tan malo como esperábamos nos consideraremos incluso afortunados.
  • Conocer tus buenos y malos momentos: hay personas que todo lo ven mal a determinadas horas del día, y que sin embargo se encuentran mejor en otras horas. Debemos de conocer nuestros ritmos de funcionamiento y de humor.
  • Hacer ejercicio: vivir aceleradamente provoca procesos neurofisiológicos -estados de ansiedad, estrés, falta de concentración...- que pueden desembocar en enfermedades psicosomáticas. El deporte lo combate porque oxigena el organismo y provoca cambios químico- fisiológicos en el cerebro, produciendo estados de euforia y relajando la tensión. 
  • Reírse de uno mismo: una táctica para no exagerar nunca tus problemas es pensar si lo que te ha ocurrido tendrá alguna importancia dentro de 20 años. No seas inflexible y no des más importancia a las cosas de la que realmente tienen. 
  • Buscar el sol: hasta el 10% de las personas padecen en invierno una depresión de temporada, un bajón sin graves consecuencias, acompañado de somnolencia y de la necesidad de comer alimentos dulces. La causa es que la ausencia de luz solar inhibe la producción de serotonina. El fin de semana conviene pasear al sol para recargar las pilas.
  • Organizarse en el trabajo: es importante ir resolviendo los problemas según se vayan presentado, hacer las cosas por orden de importancia y descansar antes de estar agotado, pues rendirás mucho más. 
  • Desarrollar aficiones: es conveniente elegir un hobby para el que se necesite concentración,- puzles, modelismo, calceta...- cuanto más complejo mejor, pues hará que nuestra mente esté ocupada en esa tarea y permitirá que nuestro organismo vuelva a funcionar con normalidad. 

TEORÍA DE LA EVOLUCIÓN DE LA AFECTIVIDAD DE H. WALLON. La persona como ser biosocial.


Para Wallon el niño es una unidad ligada a condicionantes fisiológicos y ambientales; es por ello un ser biosocial y nace preparado para serlo. Distingue cuatro dominios de desarrollo sucesivo:

  • Afectividad.
  • Motor.
  • Conocimiento.
  • Persona.
Los inferiores están integrados en los superiores. En el desarrollo psíquico se dan unas etapas de crisis que coinciden con los siguientes momentos de la vida de la persona: el nacimiento, los tres años y la pubertad. Henri Wallon distingue los siguientes estadios de la personalidad:
  • Estadio impulsivo (0 a 3 años).
  • Estadio emocional (3 meses - 1 años).
  • Estadio sensoriomotor (1 a 3 años).
  • Estadio del personalismo (3 a 6 años).
  • Estadio categorial o de socialización (6 a 11 años).
  • Pubertad y adolescencia (11 a 15 años).

APRENDER A SER AUTÓNOMOS

 La autonomía es un indicador de madurez y se encuentra íntimamente ligada con el desarrollo moral e intelectual de la persona.  Por eso, re...